(AVN) Venezuela denunció en la Organización de las Naciones Unidas (ONU) que en nombre de ayuda “humanitaria” y la presunta responsabilidad de “proteger” potencias imperiales con sus aliados arman, financian, asesoran y entrenan grupos armados para derrocar al gobierno del presidente de Siria, Bashar Al-Assad
Así lo dijo el representante de Venezuela ante la ONU, embajador Jorge Valero, durante la Asamblea General del organismo realizada este lunes. Allí recordó que una misión observadora de Liga Árabe confirmó que el presidente Al Assad ha cumplido con las reformas democráticas “orientadas a alcanzar la convivencia de su pueblo, y también con los compromisos adquiridos, en el marco del Protocolo firmado con la Liga Árabe”.
“La misión observadora de la Liga Árabe en Siria, que actuó in situ y que ha sido suspendida inexplicablemente, señaló en su informe que los medios de comunicación occidentales han falsificado la realidad que se vive en ese país”, indicó.
Manifestó que la Misión Observadora de la Liga Árabe en Siria también constató que manifestaciones pacíficas de partidarios del gobierno y de la oposición no fueron reprimidas por las autoridades.
Esa misma instancia, refirió Valero, reveló que sectores políticos adversos al presidente Bashar Al Assad han organizado grupos armados, que han practicado actos de violencia contra fuerzas del gobierno y en contra de civiles, causando numerosos muertos y heridos.
“Entre estos grupos armados se encuentra el autodenominado Ejército Libre Sirio, integrado por más de tres mil individuos”, destacó.
El embajador Valero indicó que es “evidente que estas potencias y sus aliados no quieren la paz, que no les importan los derechos humanos ni la democracia, que no creen en el diálogo político para encontrar una salida pacífica a la situación en Siria”.
Sostuvo que las potencias lo que buscan es un cambio de régimen y sustituir mediante la violencia el gobierno de Al Assad.
“Por eso desestiman las reformas políticas que ha llevado a cabo el Jefe de Estado sirio. Por eso desprecian las iniciativas de mediación de la Federación Rusa, que buscan una salida negociada y pacífica a la situación en ese país. Recordemos que, en el caso de Libia, se demonizó la iniciativa de paz promovida por la Unión Africana”, dijo.
Hizo un llamado a reafirmar el compromiso con la soberanía y la independencia de Siria, así como a cumplir los principios de la Carta de Naciones Unidas.
“Si se quiere reafirmar un fuerte compromiso con la soberanía, se debe cesar el apoyo político, militar, financiero y mediático foráneo que se brinda a la oposición y a los grupos terroristas en ese país”, puntualizó.
Agregó: “No permitamos que se repita en Siria la nefasta historia de las intervenciones imperialistas en Libia, Irak, Afganistán, y en numerosos países de Asia, África, y América Latina y el Caribe”.
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