La instalación subterránea para sustituir al estrecho búnker que existe en la actualidad se construye en la base de Kiriya en Tel Aviv (Israel), donde se encuentra el Estado Mayor General y el Ministerio de Defensa.
Según el diario, en la obra ya se han invertido millones de dólares, pero las autoridades tuvieron que detener la construcción después de un dictamen pericial negativo: el nuevo reducto no parece capaz de resistir un ataque nuclear, y ni siquiera saldría ileso de un ataque con misil provisto de ojivas convencionales.
El Jefe Adjunto del Estado Mayor, Yair Naveh, debe presentar los resultados de control a la dirección del Ministerio de Defensa para tratar de encontrar una solución aceptable. En el Departamento indican que podría ser considerada "negligencia grave", pero intentan escuchar también otras opiniones sobre el proyecto.
En la oficina de prensa militar esgrimen que "no pueden dar más detalles sobre esta o cualquier otra formación operativa".
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